EL PORTADOR DE LUZ

Mientras caia, vi como mis blancas alas se iban deshaciendo, al igual que la ceniza arrastrada por el viento. Mis compañeros habian corrido la misma suerte que yo e ibamos todos, precipitandonos sin remedio, a nuestro destino. Con un golpe seco, tocamos tierra. Miré al cielo. De las negras nubes, los relámpagos huian, todavia espantados, de la cruenta batalla ahi acaecida. Me puse de pie. Asustado, temeroso y abatido por la derrota, permaneci inmovil mientras Él me hablaba desde las alturas. Maldiciéndome, odiándome y desterrándome para toda la eternidad del Cielo. Impotente, cai de rodillas y comencé a llorar. ¿Por qué Él no lo entendia?. No me gustaba para nada sus planes para la humanidad. Los habia hecho a su imagen y semejanza, pero les privó de algo que Él no queria compartir con ellos; libertad de pensamiento. Me obligó a introducir esa luz de sabiduria y conocimiento en un árbol. Ahora, mas tranquilo y seguro de mi mismo, me dirijo a liberar a la humanidad de su oscuridad y esclavismo que los tienen sometidos. Los persuadiré a que tomen el fruto del árbol de la ciencia del bien y del mal, pese a quien le pese. Y asi, arrojar luz en sus mentes y cuerpos, dandoles libertad para pensar.

Lucifer

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Raquel, me encanta esa manera en que abarcas y recopila las emociones del momento, para proyectarlas como una explosion sensitiva de esta escena, nuevamente te felicito!!!, me ah encantado.
JoseVi ha dicho que…
Me gusta Raquel :)pones mucho sentimiento en lo escribes y creas enfasis con las comas. Enhorabuena :)

Entradas populares